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“Hubo una gran incapacidad para dirigir la reconstrucción”

“Hubo una gran incapacidad para dirigir la reconstrucción”

Tras la renuncia de Pablo de la Flor a la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios (ARCC), las críticas hacia el proceso iniciado para atender los desastres causados por el fenómeno de El Niño costero no se han hecho esperar.

El legislador de Alianza para el Progreso, Richard Acuña, es uno de los que pidieron la salida de Pablo de la Flor. En diálogo con El Comercio, el parlamentario lo «felicitó» por dar un paso al costado y emplazó al Ejecutivo a darle la oportunidad «a un funcionario que sí quiera trabajar desde las zonas afectadas”.

“Sabíamos que había un malestar por parte de autoridades regionales y locales con esta persona. Se las respaldó. Ha habido una gran incapacidad para dirigir la reconstrucción. La ARCC debe trabajar desde las regiones, trabajar desde el campo, no puede seguir viendo todo desde un escritorio desde Lima”, criticó.

Asimismo, Acuña remarcó que el Gobierno, a la par de designar al reemplazante de Pablo de la Flor, debe reconocer todos los errores cometidos durante estos meses pues solo así se podrá iniciar un trabajo serio.

Consultado por las críticas de sus colegas del fujimorismo y del aprismo que habían acusado “intereses reeleccionistas” en las autoridades regionales y locales de APP, el legislador respondió que los gobernadores y los alcaldes no están interesadas en recibir más presupuesto, sino en que se ejecuten las obras prometidas.

“En base al compromiso asumido, el gobierno central debe llevar a cabo esta reconstrucción en 3 o 4 años, no en 10 ni en 20 años. Sería un mal precedente que se politice la reconstrucción […] Si reclamamos es porque el trabajo de Pablo de la Flor no funcionó», contestó.

«Puede haber tenido mucha experiencia en el sector privado, pero no en esta reconstrucción. Lamentamos las malas decisiones del gobierno central y del fujimorismo”, agregó el también segundo vicepresidente del Congreso.

Finalmente, Richard Acuña mencionó que aún hay más de 5 mil familias viviendo en carpas y que dicho panorama es inaceptable a más de seis meses de haberse dado los estragos por el fenómeno de El Niño costero.

“Ese revela que no ha habido un buen accionar, esta no es una buena respuesta”, concluyó.

Fuente EL Comercio

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