En un importante informe elaborado por la Contraloría General de la República se puede observar dos irregularidades en el Plan de Aislamiento de Asintomáticos por Covid-19 en Chimbote.
Se trata de los hoteles que alquiló el Gobierno Regional de Áncash (GRA), y las carpas que instaló en el estadio. Con respecto a los hoteles, la Contraloría de la República identificó que la Subgerencia de Abastecimiento y Servicios Generales del GRA emitió una orden de servicio para el alquiler de 100 habitaciones por 30 días a un costo diario S/ 98.00 por persona (incluida la alimentación).
Cabe precisar que consignó el uso de cuatro hospedajes ubicados en Chimbote y Nuevo Chimbote. Todo por un importe de S/ 296 mil 400. Entre los hoteles que cobraron está el hotel San Pietro de Chimbote. Además, según la Contraloría, los funcionarios del GRA consideraron una sola cotización para determinar el valor estimado del mencionado servicio, es decir, no hicieron caso al artículo 32º del Reglamento de la Ley de Contrataciones del Estado.
¿Qué dice ese Artículo? Que “para otorgar la buena pro en los procesos de selección convocados bajo la modalidad de subasta inversa se requerirá la existencia de dos (2) ofertas válidas como mínimo; de lo contrario, el proceso se declarará como desierto”. Sin embargo, el GRA solo consideró una sola cotización.
La Contraloría agrega que el GRA pagó la totalidad del contrato pese a que los servicios no se prestaron integralmente debido a que hubo ingreso de pacientes después de la fecha de iniciado el servicio. Tampoco se tuvo en cuenta la cantidad real de aislados y de alimentos preparados.
La modalidad de contratación permitió se efectúen pagos de hasta por 13 días por camas y alimentos que no se recibieron. Con respecto a las carpas ubicadas en una parte del campo de fútbol del estadio Centenario Manuel Rivera Sánchez de Chimbote, previstas para albergar a 180 personas, se advirtió el incumplimiento en la cantidad de camas, características y funcionabilidad especificadas en el plan de acción de aislamiento temporal.
Durante la inspección física del 23 de julio del 2020 se constató que la estructura de carpas se viene utilizando solo al 3% de su capacidad debido a que se instalaron seis de las ocho carpas proyectadas y solo una de ellas cuenta con piso de madera.
Se comprobó la existencia de 100 camas (algunas de ellas sin sábanas) y se verificó la presencia de 3 personas diagnosticadas con covid-19. Además, se registraron incumplimientos en el tipo de tachos de basura y la posición en que fueron colocados los televisores en cada carpa.
Fuente La Industria
