El presidente Martín Vizcarra inauguró ayer el Hospital Regional de Moquegua, el cual ya había sido presentado en sociedad en diciembre del 2018 por el exgobernador de la región, Jaime Rodríguez, quien incluso había colocado una placa con su nombre, pero dicho recordatorio fue retirado para colocar otro, con el nombre de Martín Vizcarra Cornejo.
En su visita por el 478 aniversario de la fundación española de Moquegua, junto a la ministra de Salud, María Elizabeth Hinostroza, y los titulares de Educación, Defensa y Energía y Minas, el mandatario dijo que aquella era una obra de primer nivel y con equipos modernos en beneficio de los pobladores de la zona.
Pero en círculos técnicos de dicha región se afirma que el nuevo nosocomio está sobredimensionado, siendo un elefante blanco, aparte de los cuestionamientos de que tiene un historial de corruptelas.
“Toda la región oficialmente tiene 182,333 habitantes, y en el complejo del Hospital Regional de Moquegua bien podrían caber los servicios sanatorios del Ministerio de Salud y de EsSalud, juntos”, señaló a EXPRESO un conocedor del proyecto, aunque solicitó el anonimato por razones obvias.
Como es público, Vizcarra anunció con anterioridad que se transferirían, del centro hospitalario de contingencia al nuevo nosocomio reinaugurado, “los servicios de medicina, cirugía, pediatría, ginecología, consulta externa, laboratorio, farmacia central, así como la operatividad de la sala de operaciones, central de esterilización, entre otros”.
De otra parte, no olvidemos que, como informó este diario en su edición del 17 de junio de este año, este proyecto fue entregado en la administración regional de Vizcarra Cornejo (2011-2014) al Consorcio Hospitalario Moquegua, conformado por las empresas del ‘Club de la Construcción’ Ingenieros Civiles y Contratistas Generales S.A – ICCGSA, socia de Odebrecht, e INCOT S.A.C Contratistas Generales, por un monto de S/ 123’456,590.70.
Para la ejecución de la obra, y sin que se haya presentado el expediente técnico de la misma, como ordena la ley, en el último día del mandato regional de Vizcarra se le depositó al citado consorcio un adelanto de S/ 24’691,318.16, aunque los críticos del exgobernador moqueguano aseguran que el controvertido adelanto de fecha 30 de diciembre de 2014, por concepto de “adelanto de compra de materiales”, fue de S/ 41’869,986.58.
MÁS ELEFANTES BLANCOS
Se espera que este nosocomio no pase a sumar a otros tres hospitales, en Lima, Loreto y Huánuco, que, pese a que ya están concluidos, y algunos equipados, aún no entran en funciones por diferentes observaciones técnicas, o cinco nosocomios más que están paralizados por presuntos actos de corrupción e irregularidades, como en Cusco, Tacna, Piura y Andahuaylas.
A los anteriores se suman tres hospitales que están operando, pero tienen graves deficiencias y riesgos, como los de Ayacucho, Arequipa y Tumbes.
Tanto el Hospital de Lima Este-Vitarte, el Regional José Alfredo Mendoza Olavarría II-2 (Loreto) como el Santa Gema, de categoría II-1 (Huánuco) se han convertido en tres ‘elefantes blancos’ que el Gobierno debe asumir como su responsabilidad, nos comentan voceros de la Federación Médica Peruana (FMP).
EXPRESO llegó hasta el Hospital de Lima Este-Vitarte, ubicado en la Av. José Carlos Mariátegui (Ate Vitarte), y comprobó que sus instalaciones no funcionan, pese a que debió ser inaugurado en diciembre de 2016, en el gobierno de Ollanta Humala, y beneficiar a medio millón de personas.
La construcción costó más de S/ 181 millones y tuvo que estar listo en 720 días, pero su ejecución tomó 1,817 días.
Con una extensión de 20,036 m2, el centro médico cuenta con equipos de última generación, como tomógrafos que oscilan los S/ 80 mil, pero que corren el peligro de malograrse por inoperatividad.
Este año, el presidente Martín Vizcarra prometió que el 5 de octubre comenzaría a operar, pero aún continúa cerrado y con más de 12 mil observaciones técnicas que no vienen el caso detallar.
POR AREQUIPA
Otro problema se halló en Arequipa: se evalúa demoler el Hospital Regional Honorio Delgado Espinoza por su antigüedad y porque representa un peligro para los pacientes. “El estudio se realiza para contar con un hospital de nivel III. El trabajo se está desarrollando. Tenemos que ver cuál es la mejor solución, pero actualmente la infraestructura supera los 50 años”, subrayó Carlos Cuya, gerente regional de Salud.
COLAPSO
“El Hospital de Lima Este es uno de los ‘elefantes blancos’ listo para entregar, pero no hacerlo es culpa única y exclusiva del Ejecutivo. Está equipado, saneado y con las respectivas instalaciones.
En un primer momento acordaron entregarlo el año pasado, luego lo pasaron a marzo, junio, 28 de julio y octubre. Ahora, producto del paro y protestas médicas, nos han dicho que posiblemente esté listo en 15 días”, lamentó.
“Al costado está el [hospital] Vitarte, que es bien pequeño porque nació como una posta médica, pero la necesidad hizo que crezca de forma desordenada y ya está al límite. El nuevo nosocomio tiene tecnología de punta, pero no funciona”, agregó.
UNO MÁS
Mientras, en Yurimaguas (Loreto), califican al Hospital Santa Gema de categoría II-1 como otro ´elefante blanco´. Y es que este nosocomio, que tuvo una inversión de S/ 165 millones 635 mil 881.86 y cuenta con una extensión de 22,450 m2, no funciona por serias observaciones, a pesar de que ya fue terminado.
El edificio cuenta con 134 aisladores sísmicos para soportar movimientos telúricos de intensidad y 114 camas, y prestará servicios ambulatorios, de hospitalización y emergencias.
De otra parte, fuentes médicas de Huánuco denunciaron que el Hospital de Tingo María también entraría al paquete de los ´elefantes´, pues aún no abre sus puertas, a pesar de que la construcción y equipamiento de la obra ya se habría concluido. No se entrega porque existen observaciones como malas condiciones de la infraestructura y equipos.
“Han destinado S/ 171 millones 887,426.44 y supuestamente beneficiaría a 42,000 personas. Parece que han mentido”, señaló.
Es importante precisar que el 17 de mayo de 2018, durante la gestión de la exministra de Salud, Silvia Pessah, la construcción del establecimiento tenía un avance de 87%.
Y el 5 de mayo del 2019, la exministra de Salud, Zulema Tomás, señaló que dicha instalación tenía un 97% de avance y sería entregada en julio del 2020, generando una contradicción con su antecesora y una sorpresa para muchos, pues en un año solo se ejecutó un 10% más en comparación al año pasado.
INCONCLUSOS
El otro grave problema en el sector son las obras interrumpidas. En Cusco, por ejemplo, la edificación del Hospital Antonio Lorena está paralizada al 50% de avances, por presuntos actos de corrupción en los que están inmersos funcionarios de la constructora brasileña OAS, durante la gestión del exgobernador regional Jorge Acurio Tito.
En el 2012, se licitó las obras a un costo de S/ 190 millones, pero hasta junio del 2019 se calculó un gasto presupuestal de más de S/ 208 millones, de los cuales un 8 % habría sido direccionado al pago de sobornos a funcionarios.
Además se sabe que la empresa Dextre Morimoto, que participó con OAS en el Hospital Lorena, está involucrada en el caso Lava Jato e inhabilitada para contratar con el Estado hasta el 2022, por presentar documentos falsos para obtener la licitación de otro proyecto en Cajamarca.
OTROS CASOS
Una investigación de Ojo Público y Radio Cativalú da cuenta que el Hospital de Huarmaca (Piura) registra un avance de 1.5%, cuando hasta la fecha debía tener una ejecución del 10.7%. Uno de los motivos es que el ingeniero encargado no va a la obra. Esto provocaría que no sea inaugurado en junio del 2020, como se prometió.
El gerente de Infraestructura del Gobierno Regional de Piura, Luis Vega Palacios, comentó que la gestión está evaluando rescindir el contrato al Consorcio Hospital Piura por incumplimiento, cobrar la carta fianza y asumir la ejecución de la obra en Huarmaca. Sin embargo, este grupo presentó el 26 de septiembre una acción de amparo para evitar que la actual gestión regional les cancele el proyecto. Y le dieron la razón en el Séptimo Juzgado Civil Subespecializado en lo Comercial de Lima.
El retraso es mayor en la provincia de Ayabaca, donde el Consorcio Hospital Piura recién terminó el expediente técnico en el mes de junio, cuando la obra en general debe culminar en noviembre del 2020.
El ingeniero de la empresa, José Cervera, aceptó el grave inconveniente y señaló que se debe a una propuesta del contratista para cambiar la cimentación, lo cual no aumentará el presupuesto inicial.
ACCIONES JUDICIALES
Ayer el presidente Martín Vizcarra manifestó que tomarán las acciones legales que correspondan para destrabar la ejecución de proyectos públicos, como el proyecto de mejoramiento de los servicios de salud del Hospital Regional Hipólito Unanue de Tacna, paralizado por Sunafil, luego de una inspección de seguridad.
“A veces se necesitan decisiones judiciales. Convocamos al Consejo de Justicia para evaluar este tema. Los problemas tienen diferentes tratamientos. Nosotros vamos a tomar las acciones técnico-legales para que se termine la infraestructura y que, en el corto plazo, podamos tener el hospital. Como lo he dicho, será entregado para el 2020”, expresó ante la prensa.
El hospital de Tacna debió ser entregado en julio de 2019, pero por retrasos en la ejecución, no iba a ser posible. Esta vez, el mismo mandatario reconoció que sería entregado para el 2020. Y es que muestra un nivel de ejecución de un tercio del 100 % de la infraestructura, según se supo.
ANDAHUAYLAS Y AYACUCHO
Desde Andahuaylas informaron a EXPRESO que el proyecto del Hospital Hugo Pesce Pescetto no se concluye hace 8 años. “Están pidiendo S/ 80 millones adicionales porque hay áreas abandonadas”, alertaron.
Y en Ayacucho, la Contraloría descubrió un perjuicio económico de S/ 5 millones 164,109.42 por irregularidades en la recepción, ampliación de plazo y aprobación de partidas adicionales durante la ejecución de las obras de infraestructura y equipamiento de la nueva sede del Hospital Regional Miguel Ángel Mariscal Llerena, en el periodo 2014 – 2018.
La obra empezó el 23 de setiembre del 2014 y debió ser entregada el 11 de noviembre del 2017, pero fue recibida el 27 de setiembre del 2018, es decir, 81 días de retraso.
El informe de Auditoría de Cumplimiento N° 2207-2019-CG/MPROY-AC determinó que la irregularidad tiene como origen la recepción inconclusa, debido a que el gobierno regional recibió la obra cuando aún no estaba culminada, pese a que existían informes de supervisión que demostraban que faltaba terminar puntos de arquitecturas y estructuras, instalaciones eléctricas, equipo informático, sistemas de telefonía, telemedicina, perifoneo, equipamiento oftálmico, 15 herramientas biomédicas, así como 269 observaciones.
ATENCIÓN
El titular de la FMP advirtió que las instalaciones del Centro de Salud Materno Infantil de Surquillo, a unos metros de la municipalidad del distrito, están dañadas e incluso Defensa Civil ha declarado que es inhabitable. “Esto quiere decir que si hay un sismo de gran magnitud, los pacientes y el personal médico podrían salir perjudicados”, arguyó el doctor Salazar.
EN AREQUIPA Y TUMBES
Otro problema se halló en Arequipa. Se evalúa demoler el Hospital Regional Honorio Delgado Espinoza por su antigüedad y porque representa un peligro para los pacientes. “El estudio se realiza para contar con un hospital de nivel III. El trabajo se está desarrollando. Tenemos que ver cuál es la mejor solución, pero actualmente la infraestructura supera los 50 años”, subrayó Carlos Cuya, gerente regional de Salud.
En Tumbes, la Contraloría evidenció que hay serias deficiencias en el servicio de neonatología del Hospital Regional José Alfredo Mendoza Olavarría II-2, donde el principal riesgo es la programación de turnos de los médicos subcontratados. Y algunas áreas del hospital habrían sido declaradas inhabitables.
EN TUMBES
La Contraloría evidenció que hay serias deficiencias en el servicio de neonatología del Hospital Regional José Alfredo Mendoza Olavarría II-2 de Tumbes, donde el principal riesgo es la programación de turnos de médicos subcontratados. Incluso algunas áreas del hospital habrían sido declaradas inhabitables.
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