El gobernador electo, Richard Hancco Soncco, reveló que durante el proceso de transferencia en el Gobierno Regional de Puno, se evidenció indicios de actos de corrupción y un completo caos administrativo que le heredará la gestión de Germán Alejo Apaza.
Ningún proyecto viable, documentos por los suelos, almacenes sin inventario, trabajadores fantasma, más de mil bolsas de cemento por vencer en una obra de la carretera Lunar de Oro-Pampa Blanca y un puente carrozable en Asillo, materiales deteriorados, entre otros hallazgos denunció.
Hancco detalló que hasta hace dos días se seguían suscribiendo contratos en la Dirección Regional de Educación, reposiciones y concursos convocados a última hora en la Red de Salud Yunguyo, lo que consideró inaceptable, a pesar que advirtió sobre las presuntas anomalías.
“Basta con ver tesorería, abastecimientos y el almacén central”, dijo la autoridad electa, que además señaló que era inconcebible que los expedientes para concursos públicos se envíen vía WhatsApp de un día para el otro.
Denuncias
Hancco ya no confía en la Procuraduría del Gobierno Regional desde que denunció irregularidades en el proyecto Pradera, y aún no se toman acciones. Aseguró que, ni bien asuma el cargo, realizarán una exhaustiva auditoría, si es posible contratando a una consultora.
Previo análisis de los casos, pedirá que la Contraloría de la República intervenga la entidad, pero de corroborarse los indicios, harán la denuncia directamente ante la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios.
También considera pertinente que el nuevo consejo regional conforme una comisión investigadora para que los presuntos casos de corrupción no pasen por alto.
Perjuicios
“Es una actuación generalizada y escandalosa”, a lega el próximo gobernador, porque además, la gestión de Alejo le dejaría varias obras desfinanciadas, perjudicando su reinicio en por lo menos dos meses.
Richard Hancco señala que la gestión saliente habría realizado un gasto irresponsable de los recursos de la entidad, comprando materiales que ahora se estarían deteriorando. “Se han estockeado de material, han comprado de todo, tal vez con la intención de una coima, y ahora se están oxidando los fierros y el cemento ya se va a vencer”, refirió.
Diario Correo
