La Fiscalía especializada en delitos de corrupción de funcionarios de la Selva Central presentó una acusación formal contra el ex gobernador regional de Junín, Vladimir Cerrón Rojas, y su ex sucesor en el cargo, Fernando Orihuela Rojas.
Ambos enfrentan cargos por colusión debido a presuntas irregularidades en la ejecución del hospital Higa Arakaki, ubicado en Satipo. La Fiscalía solicitó una pena de nueve años de prisión efectiva para los implicados.
Durante su intervención, el fiscal provincial Juan Cadillo Rosario argumentó que Cerrón y Orihuela habrían alterado la ubicación del hospital, inicialmente destinado a ser construido en Satipo, trasladándolo a la zona de Río Negro.
Esta acción, según el representante del Ministerio Público, obedece a un interés indebido que busca beneficiar a ciertos actores en detrimento de la comunidad.
También se identificó a otros exfuncionarios, incluyendo a Jakelin Flores Peña, Luis Ángel Ruiz Oré, Coco Raúl Contreras Córdova y Augusto Paredes Taipe, a quienes se le imputan los mismos cargos en condición de autores.
Asimismo, se consideró a Carlos Antonio Condezo Suárez, Edith Palomino Padilla, Alberto Domingo Iberico Cedrón y Virginio Silvio Lazo Bernardo. Todos ellos en presunta calidad de cómplices se encuentran bajo la misma solicitud de pena.
Según la hipótesis fiscal, a partir del 1 de enero de 2019, cuando el prófugo de la justicia asumió el control del Gobierno Regional de Junín, comenzaron a manifestarse las irregularidades.
Este cambio, a juicio del fiscal, refleja un intento de Vladimir Cerrón de cumplir sus pactos colusorios y desviar el proyecto hacia intereses particulares.
“Manifestó su interés indebido del proyecto, el cual comenzó a plantear modificaciones al proyecto aprobado por el Gobierno Regional de Junín, donde tenía la finalidad de cambiar la ubicación del Hospital Manuel Higa Arakaki, con la finalidad de cumplir sus pactos colusorios”, señaló el documento presentado por la Fiscalía.
Fuente Diario Expreso