Pese a que Migraciones informó sobre 1.500 casos de documentos emitidos con problemas, la Contraloría General de la República reveló recientemente que unos 17.000 pasaportes fueron entregados por dicha institución sin haber pasado por todo el proceso de verificación.
Al respecto, el exsuperintendente de Migraciones, Jorge Fernández, denunció que la actual administración de Armando García firmó un contrato irregular con la empresa Thales Dis México, propietaria del software con el cual se imprimen los pasaportes. «Hay un problema nefasto de dependencia», dijo a Panorama.
«Se ha comprado todo a Thales haciendo un cóctel que solamente Thales podía cumplir en el mismo contrato: la actualización del software, el mantenimiento, así como la venta de equipos. Estamos atados indebidamente a Thales y nos está haciendo dependientes por lo menos tres años más”, explicó.
“Lo acaba de firmar (el contrato) el superintendente García Chunga por 58 millones de soles. Totalmente (lo cuestiono) porque Thales quedó con nosotros el mismo contrato por 21 millones. Está indebidamente acumulado”, remarcó Fernández.
Pasaportes no verificados
Por otro lado, el exsuperintendente de Migraciones reconoció que durante su mandato se emitieron 1.500 pasaportes sin validación, algo que generó que muchos usuarios tuvieran problemas al momento de viajar. Sin embargo, señaló que los 17.000 documentos sin verificar corresponden a diversas gestiones entre 2019 y el 2023.
Thales y Migraciones
Las empresas Thales e IN Continu poseen desde hace años el control casi absoluto de todo el proceso de emisión de pasaportes electrónicos en el Perú. Proporcionan desde las libretas físicas hasta los códigos y el software de operación que permiten la producción y lectura de estos documentos.
Todo comenzó en el 2015, cuando Migraciones contrató al Consorcio In Continu Et Services S.A.S. – Gemalto México S.A. de C.V. para instalar el servicio de emisión de los pasaportes electrónicos, por más de 120 millones de soles. Desde esa fecha, ambos proveedores son contratados con millonarias adjudicaciones.
Fuente La República
