En silencio pero de forma sistemática, el Colegio de Ingenieros (CIP) reúne pruebas de las presuntas irregularidades en la descolmatación del río Piura.
Según el decano de este colegio profesional, Hugo Garcés Solano, tras la recopilación de informes de inspecciones, estos se pondrán en manos de los fiscales y Contraloría, en caso de detectarse fallas.
“Hemos estado en Sechura en la posible zona de salida al mar (tramo I) y es más de lo mismo. No hay supervisión, no está la maquinaria completa, hay maquinaria obsoleta, no se sabe exactamente qué están haciendo. Nosotros lo estamos documentando para cuando esto acabe. Los informes los enviamos al sistema anticorrupción y Contraloría para que sepan lo que está pasando […] y que termine en la denuncia de este despilfarro millonario que vemos”, anunció.
Sin resultados
Garcés precisó que la observación que siguen haciendo es que el actual proceso de descolmatación no protege a las ciudades.
“El 2015 dijeron que iba a funcionar y el río Piura se salió. No quisiéramos que se salga el río, quisiéramos que funcione [la descolmatación] pero de la manera que están trabajando, yo creo que eso no va a dar resultado”, agregó.
Indicó que ya hicieron el cuarto informe de sus recorridos que también envían a las autoridades locales.
Cabe indicar que la descolmatación del río Piura se ejecuta en ocho tramos desde la laguna La Niña (Sechura) hasta el puente Salitral (Morropón).
Un quinto tramo, entre este puente y Los Ejidos también se ha iniciado. La inversión supera los S/215 millones.
Tramo urbano
Garcés explicó que el cuarto informe que elaboran es de la inspección al tramo urbano, entre el puente Bolognesi y la presa Ejidos.
“El río está al centro y la maquinaria al costado. Están removiendo un poco de arena y ganándose lo millones de soles con trabajos que no van a servir para nada. En esta parte urbana ya no hay nada para descolmatar. Están, como se dice, haciendo la finta; hay máquinas ahí para decir que estuvieron”, indicó.
En este tramo urbano se pagarán S/10 millones a la contratista.
¿Supervisión?
Para el CIP ahora la falla principal es que falta la supervisión de una empresa especializada en este tipo de obras millonarias.
Debido a problemas en la licitación, Agro Rural contrató supervisores externos para vigilar los trabajos en proceso por cada tramo.
“Cuando se contrata una empresa supervisora, van 10 a 15 ingenieros de diferentes especialidades. Pero acá van a contratar a un ingeniero que no hará nada por mucha experiencia que tenga. No va a poder supervisar una obra de esa magnitud. Lo ideal es una empresa consultora”, dijo.
Por su parte, un vocero de Agro Rural informó que existe confianza en la labor de los equipos de supervisores externos que ha contratado Agro Rural.
“Que lo hagan porque el trabajo de los supervisores existe y las fichas técnicas se aprueban”, refirió el vocero sobre el anuncio del CIP de presentar pruebas de las presuntas fallas.
Agregó que ya enviaron al Sistema Anticorrupción la relación de profesionales a cargo de la supervisión en los distintos tramos del proceso de la descolmatación.
Aquí figura los ingenieros agrícolas, asistentes y hasta topógrafos.
Fuente El Tiempo
