Como se sabe, la corrupción es un cáncer que nos está destruyendo como sociedad. Se ha llegado a una situación que ahora se le considera algo normal, hasta se reeligen autoridades corruptas bajo el argumento “roba pero hace obras”. Algunos políticos de izquierda aprovechan esta situación para criticar al modelo económico, don los “ricos se hacen más ricos y los pobres más pobres”.
La corrupción no tiene color político, roban tanto los de derecha como los de izquierda, como estamos viendo lo que ha sucedido en el Perú en los últimos años. La corrupción depende de las personas, de sus valores, más no del sistema económico.
A nivel macro, las corrupción se da entre los grandes empresarios y políticos corruptos, con el contubernio de algunos malos jueces y fiscales, que roban miles de millones de soles, sin ningún escrúpulo, ostentando sus riquezas mal habidas sin ningún rubor. Por las noticias conocemos a estos peces grandes, que por “milagro” no reciben el castigo que se merecen, pero también existen algunos de estos “nuevos ricos” en nuestro entorno, que aparentan ser empresarios exitosos.
Por otro lado, está la corrupción a nivel micro, de pájaros fruteros, pero igual, hacen daño a la sociedad. El más conocido de este tipo de corrupción es lo que hacen algunos malos policías, que por unas cuantas monedas dejan pasar graves faltas de tránsito, tal como lo vemos en las carreteas alrededor de la ciudad de Ayacucho. Otra forma de la micro corrupción son las coimas que se debe pagar a algunos malos funcionarios y trabajadores de las entidades públicas, para que estampen su firma en una orden de compra o que un documento pase de un escritorio a otro, entre otros.
Las oficinas de abastecimiento, tesorería y contabilidad, son las áreas donde se debe “aceitar” para que hagan su trabajo, que es dar trámite oportuno a todo documento que les llega. Muchos de los trabajadores de esas dependencias, exigen a proveedores, directa o indirectamente, regalos, pagos de dinero o invitaciones a cenar o almorzar para estampar sus firmas en documentos o para que sus trámites avancen. Este es el inicio de la mega corrupción, se avanza poco a poco, de lo micro a la macro.
A causa de la corrupción, el año pasado el Perú perdió más de 24 mil millones de soles, dinero suficiente para construir cientos de escuelas y hospitales o sentar las bases productivas para sacar al país del atraso.
Fuente Jornada
