La reconstrucción de la avenida Miraflores de Trujillo marcharía de acuerdo a lo planificado, de no ser por la irregularidad advertida durante su ejecución por la Contraloría General de la República.
Resulta que el supervisor de la obra que será culminada en el 2020 desempeñaba simultáneamente la misma función en otra obra que es ejecutada por la Municipalidad Provincial de Trujillo (MPT).
DETALLES
De acuerdo al reporte de avance N°002-2019-OCI/SCC, el Gobierno Regional La Libertad, como unidad ejecutora de la obra, le otorgó el 26 de agosto la buena pro al Consorcio Trujillo Norte, por el servicio de supervisión en los trabajos de la avenida Miraflores que están a cargo de la contratista Coral.
El jefe de supervisión, Paúl Vargas Vigo, es el que debía velar por el cumplimiento de los estudios previos y definitivos en la obra, pero tenía desde el 7 de agosto un contrato para desempeñarse en la obra denominada «Mejoramiento del servicio de transitabilidad en la urbanización Huerta Grande», obra que se encuentra paralizada.
MEDIDA
El responsable de la reconstrucción en La Libertad, Ever Cadenillas Coronel, en conversación con Correo, reconoció la irregularidad.
«Ya se tomaron cartas en el asunto y se retiró a ese supervisor, (que) es supervisor en la municipalidad y en la Región».
El vicegobernador regional deslindó cualquier responsabilidad en esta advertencia realizada por la Contraloría.
«Tiene que quedar claro que la supervisión se gana en concurso público, las empresas son totalmente ajenas a la gestión, son empresas privadas que se rigen a la ley y, naturalmente, si están en falta hay que sancionarlas», añadió.
Fuente Diario Correo
