Peligrosos avances. La Contraloría advirtió una serie de graves irregularidades en la ejecución de la obra de agua potable y saneamiento en las habilitaciones urbanas Juan Tomis Stack y Ciudad De Dios, en el distrito de San José.
Según el órgano de control, los incumplimientos detectados podrían ocasionar que la contratista solicite ampliaciones de plazo y el pago por gastos adicionales.
EXPEDIENTE. Desde hace más de tres meses se iniciaron los trabajos de esta obra que otorgó la Entidad Prestadora del Servicio de Saneamiento (Epsel) al consorcio Santiago por un valor de S/7’ 050 133.
Sin embargo, las irregularidades que detalla la Contraloría en su informe de acción simultánea N° 007-2018 se originan desde el expediente técnico de la obra.
De acuerdo a este documento, el proyecto consideró terrenos agrícolas por los cuales pasará la línea de conducción de agua potable. Este hecho fue advertido por el jefe de supervisión de la obra a través de una carta de fecha 5 de septiembre donde solicitó a Epsel las “autorizaciones de servidumbres”.
Finalmente, los propietarios de los terrenos aceptaron la entrega a cambio de ser beneficiados con pases de agua y “se resarcidos de los daños ocasionados a los cultivos originados con la ejecución de dicha obra”.
ERRADO. Lo más sorpresivo, entre las diversas fallas del expediente, es que uno de los profesionales que dio conformidad a este documento no está habilitado por el Colegio de Ingenieros del Perú.
Se trata del ingeniero David Ojeda Arriarán quien, tal como explica la Contraloría, ejerció funciones sin contar con la certificación requerida, por lo que el expediente puede ser observado e incluso ser declarado nulo.
Hasta el momento, Epsel solo ha respondido por algunas de las observaciones de la Contraloría asegurando que ya cuentan con el permiso de los propietarios de los predios y que el proyecto se ejecuta según las especificaciones del expediente técnico.
Fuente Diario Correo
