El consejero delegado (presidente) del Consejo Regional de Moquegua, Luis Miguel Caya Salazar, está en graves problemas. Lo involucraron en el escándalo de corrupción que estalló en el Gobierno Regional de Moquegua (GRM).
El miércoles pasado fue capturado el representante de una empresa proveedora del GRM intentando sobornar al jefe de Asesoría Jurídica, Carlos Murillo Tapia, para evitar una sanción por incumplimiento de contrato. El consorcio se llama Educando (empresa Corporación Hallibur SAC y Dalse SA) y su representante implicado es Luis Ranillas Llanos.
El gobernador Zenón Cuevas Pare y Carlos Murillo sindicaron al presidente del Legislativo en el acto de corrupción. Ambos dieron detalles de cómo el proveedor venía ofreciendo soborno a Murillo Tapia a cambio de que emita opinión favorable para que no se aplique una penalidad por un contrato que incumplió. Y según el presunto sobornador, había el visto bueno de Luis Miguel Caya, convertido en opositor de la gestión de Cuevas.
“Yo lamento que de por medio esté uno de los consejeros. En los audios se hace referencia al consejero Luis Miguel Caya”, señaló textualmente el gobernador. Murillo Tapia asegura que el empresario involucrado le indicó que tenía el encargo del consejero Caya Salazar para que no se ejecute la carta fianza. «Ha revelado que todo estaba hablado con el consejero», insistió.
El asesor jurídico asegura tener como pruebas audios y conversaciones. Sostiene que los adjuntará en la denuncia ante el Ministerio Público. Asimismo, admitió que se reunió dos veces con el proveedor y en la última oportunidad le ofreció el dinero.
Pero el consejero acusado Luis Caya niega haber tenido participación en estos actos de corrupción. Asegura que sí, efectivamente, habló con el empresario en una ocasión que no duró ni dos minutos y que le dijo que vaya al área correspondiente. Caya refiere que se allana a las investigaciones fiscales. Ranilla Llanos fue detenido el miércoles cuando entregaba 7 mil soles a Murillo en la Plaza de Armas.
Fuente La República
