El gerente de la Unidad Ejecutora del Alto Piura, Marco Vargas, dio a conocer que el 5 de noviembre se realizará la visita al proyecto junto a un notario para realizar la constatación física de obra, luego de resolverse el contrato con el Consorcio Obrainsa Astaldi (COA).
Informó que el consorcio ya cerró oficinas en la zona de influencia como Chulucanas y Huancabamba, además del retiró de su personal. Sin embargo, aún mantiene una deuda de más de 20 millones de soles con los proveedores piuranos.
Por ejemplo, indicó Marco Vargas, debe cerca de un millón de soles por servicio de vigilancia, así como a la empresa que brindaba servicio de agua en bidones, además de 800 mil soles a un restaurante ubicado en el distrito de Palambla.
“Ya hemos notificado a la empresa para que inicie el pago de las deudas, pero no tenemos respuesta. Por ahora estamos ofreciendo asesoría legal para que los pequeños proveedores interpongan su denuncia penal contra la empresa. Son cerca de 200 empresas perjudicadas”, refirió.
A esta deuda se suman los S/57 millones por adelanto de obra que le adeuda al Proyecto Alto Piura, pues de los S/70 millones entregados al consorcio solo devolvió S/14 millones en obra, que se reflejan en los dos kilómetros y medio del túnel de trasvase.
“Ellos insisten que la paralización responde a un desbalance económico porque se les debió otorgar 108 millones y no 57, pero el monto total del dinero figuraba en las bases; estas condiciones se precisaron en la licitación y ellos aceptaron. Ahora, después de dos años no pueden cambiar las regla de juego”, refirió.
Precisó que a la fecha el proyecto Alto Piura tiene 11 arbitrajes con el consorcio, los cuales suman 27 millones de soles, que solicitan por ampliaciones de plazo y pago de adicionales. Ninguno de ellos ha sido resuelto, todos están en proceso.
Fuente La República
