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Dictan prisión preventiva a Edwin Licona, exgobernador regional de Cusco

Dictan prisión preventiva a Edwin Licona, exgobernador regional de Cusco

Edwin Licona Licona, exgobernador regional de Cusco, fue dictaminado a ocho meses de prisión preventiva, en medio de un proceso que se le sigue por los presuntos delitos de colusión agravada, negociación incompatible, cohecho pasivo, encubrimiento real y omisión de funciones.

El juez Carlos Román, titular del Octavo Juzgado de Investigación Preparatoria Especializado en Delitos de Corrupción de Funcionarios, resolvió aceptar el pedido de la fiscal Gladys Aparicio y envió al exmandamás cusqueño al Penal de Qenccoro.

El proceso data del año 2016, cuando la gestión de Licona Licona adjudicó 19 licitaciones para la descolmatación de ríos frente a la época de lluvias en Cusco. Según la denuncia estas adjudicaciones se hicieron sin tomar en cuenta los criterios técnicos necesarios y se contrató los servicios con empresas sin experiencia ni aval económico.

Sumado a esto la fiscal presentó evidencia sobre el supuesto ‘pago de favores’ a la empresaria cusqueña Janet Castro, a cuya empresa el Gore Cusco favoreció con un contrato por más de 75 mil soles. Según la tesis fiscal la empresaria había entregado una coima antes de postular a la licitación y pedía que se le salde esta ‘deuda’.

Según la Fiscalía la motivación para el pedido de prisión preventiva es la falta de arraigo de la exautoridad cusqueña y falta de vínculo laboral, ya que se desconoce su lugar de trabajo luego de haber abandonado el Gobierno Regional del Cusco.

En palabras del juez Carlos Román en este caso sí existe el peligro de fuga y obstaculización por lo que dictaminó la prisión preventiva de Edwin Licona y Janet Castro a partir del seis de julio del 2019 hasta el cinco de marzo del 2020, cabe mencionar que la empresaria cusqueño no asistió a la última audiencia y se halla como prófuga hasta el cierre de la presente edición

DATO:

-Aldo García, abogado de Edwin Licona, citó que apelará la decisión del juez, señalando en todo momento que el celular incautado (de donde se extraen las conversaciones entre Licona y Castro), sí está registrado a nombre de la exautoridad, pero no se puede probar que haya sido él quien escribía los textos.

Fuente Diario Correo

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