compras-estatales

Más líos en la Sunat

Más líos en la Sunat
mas_lios_en_la_sunatDiario Exitosa publicó ayer un informe de la OCI de la entidad recaudadora del Estado que revela una esfera de corrupción al más alto nivel.

Funcionarios beneficiaron a universidades e institutos para que dicten cursos ‘fantasmas’ o bajo procesos irregulares que ocasionaron pérdidas a la Sunat por S/. 5 millones 788 mil 802. Lo peor es que las ‘perlas’ no terminan aquí. A continuación, la historia de un extraño contrato de arrendamiento, un festín de contrataciones y hasta la increíble pérdida de inmobiliario, ocurridos ante los ojos de la gestión de Tania Quispe.

Un estudio técnico de evaluación de las sedes de la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (Sunat), bajo los parámetros del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), concluyó que las condiciones de seguridad para la vida humana en el local de Miraflores, donde se ubica la Intendencia Regional Lima (IR-Lima), eran de “riesgo inminente”.

Ante este diagnóstico, el alquiler de nuevos locales donde se debía albergar a más trabajadores debido al crecimiento de la recaudación tributaria, era de suma urgencia.

En agosto del 2012, la IR-Lima elevó la solicitud de arrendamiento de un inmueble para la ex División de Auditoría, solicitando que este tenga una capacidad para 792 personas, 7,524 m2 (calculando 9.50 m2 por persona), contar con 27 estacionamientos aproximadamente, que se encuentre en buen estado de conservación y que tenga una disponibilidad inmediata a la firma del contrato. Entonces se inicia el proceso de búsqueda de local.

EL CONTRATO

Apenas se elevaron estos términos de referencia a la Gerencia de Soporte Administrativo (GSA), comenzaron a ocurrir hechos extraños. Modificaron insólitamente las condiciones solicitadas en casi todos los aspectos sin ningún sustento técnico que motive dichos cambios. Aumentaron la cantidad de personas a 837, el área estimada a 9,150 m2 y 10,000 m2; eliminaron el término “disponibilidad inmediata” por el de “Disponibilidad para visitas de inspección técnica antes de la firma del contrato”, dándole un plazo de veinte días al propietario para que lo desocupe y 3 meses para la entrega; y ninguna necesidad de estacionamientos.

Es aquí donde aparece el nombre de la empresa Arte Express y Compañía SAC, dueña de un inmueble de 10,880.40 m2 ubicado entre la Av. Nicolás de Piérola 589 (ex Colmena) y Jirón Ocoña 401-409, Cercado de Lima. Esta empresa ofrece su inmueble en alquiler por un costo de renta y gastos de mantenimiento de S/. 15’926,281.92, por 36 meses.

Lo que ofrecía Arte Express se ajustaba como anillo al dedo a las nuevas condiciones que exigía la Sunat. A pesar de ello, hicieron algunas observaciones a los términos de referencia pero mantuvieron el nuevo plazo de entrega de 90 días a la firma del contrato.

De hecho, la disponibilidad del local era un requisito indispensable pues el hacinamiento en que se encontraba la IR-Lima ponía en riesgo la vida de los trabajadores, por ello el Órgano de Control Institucional (OCI) no entiende la modificación en un aspecto tan importante.

EL POSTOR SOLITARIO

Luego de realizar indagaciones en el mercado, la Sunat señala que, oh sorpresa, solo existe un inmueble con las características técnicas requeridas y de ese modo Arte Express se constituye en el único proveedor.

Su cotización se convierte automáticamente en el Valor Referencial y su local es arrendado mediante un proceso de exoneración por su condición de proveedor único.

Sin embargo, según el Informe Especial del OCI Nº 7-2014-SUNAT/1C0000, en el estudio de posibilidades que ofrece el mercado (EPO) del 30 de enero del 2013, “se evidenció la existencia de locales de menor extensión, con mejores condiciones, que se adecuaban a las necesidades de disponibilidad inmediata y de buen estado de conservación”.

Así lo señala la especialista Ingeniera Martha Rodríguez Montani autora del informe técnico, donde evalúa que “para esa fecha, existían ofertas de predios con áreas de 4,000 a 5,000 m2. Al existir escasez de predios con áreas de 7,000 m2, con mucha mayor razón existía escasez de predios con áreas de 10,000 m2. Bien se pudo evaluar la posibilidad de convocar a dos proveedores que juntos hicieran la cantidad de metraje requerido, los cuales existían en el mercado de ese entonces”, señala en su referido informe.

Y es que todos los cambios efectuados favorecieron sospechosamente a que Arte Express se convierta en postor solitario. El ampliar la extensión, la exclusión de las cocheras y otras, le facilitaron el camino. A esto se le debe añadir el gasto que SUNAT estimó por la remodelación integral del local, que ascendió a S/. 10’798,000.13, que sumados al pago de la renta y mantenimiento dan un total de 26’724,282.05. “Este monto es aproximadamente 3 veces el importe que la misma SUNAT invertirá para el reforzamiento del local de Miraflores”, señala la misma especialista.

LA CONSUMACIÓN DE LA CRIOLLADA

Pese a todo, se firmó el contrato Nº 120-2013/SUNAT-ARRENDAMIENTO, el 04 de marzo del 2013. El pago mensual, que incluye el alquiler y mantenimiento, suma S/. 442,396.72. Arte Express debía entregar el inmueble en un plazo máximo de 90 días calendarios, es decir el 02 de junio del 2013, no cumplió lo pactado y recién lo entregó el 14 de octubre de 2013, es decir 7 meses después de firmado el contrato.

Previo a la entrega, Sunat realizó una visita de inspección el 25 de setiembre, presentando observaciones en el edificio, dándole plazo a la empresa para subsanarlas. A la entrega del inmueble, se firma el acta señalándose que el arrendador “había culminado la subsanación de las observaciones correspondientes”, sin embargo, la comisión auditora realizó una inspección posterior y encontró que faltaba instalar un ascensor, no se encontraba instalado el panel electrónico del sistema de detección y alarma, no se habían instalado extintores portátiles y señales de seguridad, entre otras faltas. Es decir, Sunat recibió el local y otorgó la conformidad a pesar que no contaba con las condiciones pactadas, y consideraron el inicio del pago de alquiler desde diciembre del 2013 y no desde enero (tres meses después de la recepción formal). Lo habían contado desde el día de la inspección. Este “error” le costó a la Sunat S/. 280,184.59.

CON LA SOGA AL CUELLO

Tras el informe, se ha encontrado como responsables a Víctor Manuel Cabrera Mérida, jefe de la división de infraestructura y equipamiento (Área usuaria canalizadora); Ricardo Arturo Toma Oyama, Intendente de Lima (Área Usuaria); Carmen Patricia Chávez Mora, gerente de soporte administrativo Lima 3 (órgano encargado de las contrataciones); Mónica Castro Romero, supervisora de la gerencia de soporte administrativo Lima 3 (órgano encargado de las contrataciones) desde el 7/9/2012 a la fecha; Juan Carlos Ortiz Bisso, profesional especializado de la gerencia de soporte administrativo Lima 3. Todos ellos afrontan procesos administrativos. Todos ellos también fueron contratados por el actual régimen de Tania Quispe Mansilla, y la historia no termina.

Fuente Diario Exitosa – Periodista Ramón Espejo

Artículos relacionados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Translate »